Considerando que la transformación digital tuvo que acelerarse abruptamente a partir de la pandemia, las clases presenciales le han dado mayor protagonismo al uso de Internet en las aulas.
En este contexto, las subsecretarías de Telecomunicaciones y de Educación impulsaron el proyecto “Conectividad para la Educación 2030”, el cual busca contribuir con la disminución de la brecha digital, incluso en las escuelas más lejanas de las regiones de Chile.
Nueve empresas proveedoras están desde 2021 a cargo de implementar este proyecto y una de ellas es Ingbell, la cual se ha distinguido por ser la primera en cumplir la meta dellegar a determinados colegios de la Región Metropolitana, O´Higgins y Maule. Es así como alumnas y alumnos de establecimientos educacionales de las comunas de Melipilla, Buin, Curacaví, Alhué, María Pinto, Paine y San Pedro ya están recibiendo internet de última generación gracias al trabajo de Ingbell. La empresa se destaca por formar equipos con gente de estas comunas, quienes se han distinguido por entregar un servicio de calidad y de rápida respuesta.
Rodrigo Marchant, gerente general de Ingbell, comenta: “La meta es llegar a la última milla de las comunas que más lo necesitan. Además, poder replicar iniciativas como las que se está materializando actualmente en Alhué, donde en un esfuerzo público-privado muy valioso y visionario, la Municipalidad de esa comuna instalará internet provisto por Ingbell en cada hogar que cuente con un alumno o alumna matriculada en los establecimientos acogidos al programa del Estado”.
En tanto, Alexander Ortiz, encargado de Soporte de la empresa, comenta que “antes no tenían buena conectividaden diversos colegios de estas comunas, ya que no estaba habilitada la fibra óptica, pero nosotros llegamos a sitios rurales e inhóspitos para proveer de Internet a aquellos establecimientos que no tienen una matrícula de más de 20 alumnos”.
Agrega que “para padres, profesores, alumnos y directoresha sido un cambio de vida, porque ha mejorado notablemente la conexión en los colegios y, con eso, se ha renovado todo el proceso educativo. Muchas personas que viven en los sectores donde se encuentran los establecimientos nos han contactado para saber si a futuro se ofrecerá el servicio residencial, porque han sabido que es muy bueno y rápido para todo tipo de eventos”.
Para los trabajadores de Ingbell que viven en las comunas, ha sido una labor compleja tener que llegar a lugares tan alejados, ya que no solo se ejecuta la instalación, sino que también se deben sacar los permisos, hablar con los propietarios y pasar por las parcelaciones, lo que incluye un compromiso de gestión y logístico. “Ha sido arduo, pero gratificante”, añade Ortiz.
Mejorar la conectividad digital de unos 10.000 establecimientos educacionales que reciben aportes del Estado a lo largo de todo el país es el gran objetivo de este programa, beneficiando así a unos 3.200.000 de estudiantes. En esta línea, dicha iniciativa además de conectar con Internet a muchos niños y jóvenes por primera vez, irá incrementando gradualmente las velocidades de conexión de todos los establecimientos contemplados al término del período de obligatoriedad de las bases.
Internet hogar
En Isla de Maipo, Paine y Curacaví el servicio de internet residencial destaca por la atención personalizada de los trabajadores de Ingbell que residen en esas comunas, así como por la estabilidad de la conectividad por fibra óptica y la rapidez de las visitas técnicas que duran hasta las 23:59 hrs., lo que acorta bastante los tiempos sin servicio.
Más de 2500 hogares de esas comunas tienen el servicio de Internet y ha sido una buena experiencia, tanto para clientes como trabajadores, porque al ser ambos de la zona, existe mayor conocimiento sobre el territorio, confianza sobre el servicio y rapidez de respuesta.